sábado, 29 de agosto de 2009

Matices verde esperanza

Recuerdo que cuando tenía aproximadamente ocho años, mi padre nos sorprendió con un viaje de vacaciones para toda la familia. De repente me vi dentro de un tren. El espacio era pequeño pero todos cabíamos. Se veía muy simple todo, pero yo tenía tanta alegría y tantas preguntas. A mi padre y a mi madre les había tocado otro lugar. Y cada vez que venían a vernos yo los bombardeaba de preguntas. Como el espacio era pequeño y los asientos muy simples casi como una tabla recta corta pero forrada. Me preguntaba si ahí íbamos a dormir o nos llevarían a otro lado. También recuerdo que pregunté a mi padre que dónde estaba el baño. Lo que él me respondió fue si ya quería ir y yo le mentí diciendo que sí pues, no quería esperar. Para mi sorpresa me dijo que debajo de mi asiento. Iba de sorpresa en sorpresa me imagino que me quedaba boquiabierta. Insistía en relación a las camas y solo recibía la respuesta que tenía que esperar hasta llegar la noche para saber.
Me movía de un lado para el otro rebozaba de felicidad y de inquietud. No sé que sentían mis hermanos, todos mayores que yo, en ese momento yo era la menor, ahora tengo dos hermanas menores que yo. Pero lo que más me llamó la atención era lo que observaba a través de la ventana. Todo verde, árboles de todo tipo. ¡El tren pasaba a través de las montañas! El verdor vivo de la naturaleza era de admirarse. ¡Nunca había visto algo así, una niña de 8 años viviendo en la ciudad!
La noche llegó y tuve que ver como las camas aparecían por arte de magia de las paredes del pequeño vagón del tren. ¡Las paredes eran las camas! ¡Guau! ¡Qué alegría! Las sorpresas no acababan. No había problema de calor, todo el ambiente era agradable y lo disfrutaba.
Al otro día al despertar, seguí disfrutando de lo verde de la naturaleza. ¡Se veían cosas increíbles! Eran lugares donde el ser humano no había entrado. El tren pasaba rápido. Verde vivo, verde claro, verde oscuro, verde limón, verde bandera, verde militar, diferentes tonalidades de verdes. Color verde símbolo de la esperanza que da alegría al corazón.
Nunca olvidaré ese viaje. Me enseño que a mi alrededor hay esperanza. Que debo disfrutar del ambiente que me rodea mientras camino por la vida. Mientras me enfrento a dificultades algún verde de la naturaleza me dirá sin palabras; mira mis matices verdes, hay esperanza en esta vida y más si conoces al Dios que creó la naturaleza.
Que tu vida se llene de matices verde esperanza.

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